Henning Mankell nos propone Cortafuegos, una interesante obra que salio en el 2004 y que supera ampliamente las 500 paginas, una novela negra que comienza su trama en Ystad, Suecia en un otoño de 1997 cuando fallece un hombre en unas circunstancias algo extrañas al frente de un cajero automático. No pasa demasiado tiempo y sucede algo aun más extraño, dos jóvenes asesinan de manera brutal a un simple taxista. La policía actúa rapido y logra capturarlas, una vez en la comisaría, todos quedan realmente sorprendidos por la actitud de las adolescentes, totalmente agresivas y mostrando una indiferencia hacia este crimen realmente escalofriante.
Pero cuando un agente se descuida una de las adolescentes consigue escapar. Al otro día ocurre un problema en el suministro de energía de la ciudad que deja sin luz a gran parte de Escania, pero cuando los técnicos que se encargarían de arreglar el problema logra llegar a la estación, se encuentran con algo que los marcaría para siempre, un descubrimiento considerablemente macabro. Kurt Wallander, inspector encargado del caso, no va a tener una tarea realmente sencilla aquí, no solamente debido a las complicaciones en el ámbito informático si no además al darse cuenta que en su equipo de investigación hay un traidor, a esto sumarle el hecho de que el mismo se siente demasiado solo en el ámbito sentimental, hace que el mismo comience a dudar si seguirá siendo policía o no.
Booktrailer del libro Cortafuegos de Henning Mankell
Acerca del Autor Henning Mankell
Novelista nacido en Suecia en 3 de febrero de 1948 fue dramaturgo sueco, reconocido internacionalmente por su serie de doce novelas negras sobre el inspector Kurt Wallander También escribió una serie de obras de teatro y guiones para televisión.
Era un crítico social de izquierda y activista. En sus libros y obras de teatro destacó constantemente los problemas de desigualdad y las injusticias sociales en Suecia y en el extranjero. En 2010, fue Mankell bordo de uno de los barcos de la Flotilla de la Libertad de Gaza, que fue abordado por las fuerzas militares israelíes.
Mankell compartía su tiempo entre Suecia y los países de África, sobre todo Mozambique, donde comenzó un teatro. Hizo donaciones considerables a las organizaciones de caridad, en su mayoría conectados a África, murió después de sufrir un penoso Cancer de pulmón durante tres años consecutivos.